Reforma, 8 col., Luis Cruz
Ciudad de México (28 enero 2013).- A las cárceles del DF les urgen por lo menos 6 mil espacios para contrarrestar el hacinamiento en que viven sumidos los internos.
Del mismo modo, se requieren reformas legales que permitan desahogar otros 4 mil lugares, aseguró en entrevista María Mayela Almonte Solís, subsecretaria del Sistema Penitenciario capitalino.
Actualmente, pese a que la capacidad instalada de los reclusorios capitalinos es de 20 mil espacios, la población penitenciaria asciende a 42 mil.
La funcionaria también reconoció que, para combatir el problema de la corrupción al interior de las cárceles de la Ciudad, es primordial atacar la sobrepoblación.
«Lo que tenemos que hacer es la posibilidad de abrir espacios para poder ubicar de mejor forma a los internos», indicó Almonte.
Una posible vía para desahogar la crítica situación carcelaria es construir dos nuevos penales, con una capacidad para 3 mil internos cada uno, más las dos torres que ya se erigen a un costado del Reclusorio Norte.
«Las torres sólo nos van a abrir alrededor de mil 500 espacios, pero necesitamos más. Con otros dos reclusorios que pudiésemos construir estaríamos combatiendo el hacinamiento», confió la funcionaria.
En junio de 2009, el entonces Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, prometió que la construcción de las torres arrancaría en septiembre de ese año. Sin embargo, hasta el momento, éstas aún no han sido concluidas.
Pero, de acuerdo con la funcionaria, para combatir el hacinamiento también es imperativo reformar el código penal para quitar las agravantes al delito de robo y que se pueda ofrecer la libertad bajo fianza a los reos acusados de robos menores.
«(Con esta medida) alrededor de unos 4 mil internos pudieran adecuar su penalidad», dijo.
También se debe agregar, indicó Almonte, que los internos del fuero federal deben ser trasladados a penales federales. En esa situación, precisó, están alrededor de 5 mil reclusos.
En octubre del año pasado, la diputada Olivia Garza, presidenta de la Comisión Especial de Reclusorios de la Asamblea Legislativa del DF (ALDF), criticó que en las cárceles locales la población penitenciara viva en «situaciones infrahumanas».
«Es tal el hacinamiento que, para dormir en los reclusorios, en las celdas, en las estancias, se cuelgan los reos para dormir parados», lamentó entonces.
Justo con el fin de combatir el hacinamiento, en junio pasado, la ALDF aprobó reformas al código penal para que, en ciertos casos, las penas impuestas a una persona en dos o más sentencias se cumplan de forma simultánea.
Sin embargo, esta reforma se ha aplicado escasamente ante la falta de jueces especializados.
Consultores en Investigación y Análisis de Medios, S.C. 